martes, 21 de junio de 2011

Y ahora?

Ahora tenemos el panorama de octubre despejado,  oficialismo, oposición, todos en carrera.
Antes de leer algo de lo que dijo la presidente, pensaba en el concepto de democracia: gobierno del pueblo. Ser demócrata es entonces respetar la decisión del pueblo, por lo que el actual gobierno de demócrata solo tiene la simpatía con Obama, porque cuando hace dos años, sí, sólo dos años pasaron, aunque parezca la prehistoria de la Argentina, le tocó perder y tener que administrar el ejecutivo con un legislativo que por elección del pueblo, o por democracia, o decisión democrática, se prefirió mayoritariamente a los legisladores no oficialistas, el gobierno tomó la postura de k-garse en ese resultado y omitir, de la forma que le resultó conveniente, la voluntad del poder legislativo.
Si creen que el Congreso está de adorno, entonces que paguen el costo político de anularlo de frente al pueblo, y no desde un escritorio mediante DNU, veto y/o billetera.
Resultó después que me puse a leer algunos de los conceptos esgrimidos por la presidente en su (ab)uso de la k-dena nacional (porque convengamos que Cadena Nacional es para otra cosa supuestamente), y resulta que con cara de piedra (imagino porque no lo ví) manifestó “vamos a someternos una vez más a la voluntad popular”. Para qué lo dice?? Si después se va a k-gar en el resultado. Si 60% de los votantes la llegaran a rechazar, haría algún tipo de mea culpa? Poco hay de antecedentes que hagan pensar que sea una posibilidad.
El anuncio lo hizo en k-dena nacional, lo que movilizó a las huestes de la oposición a buscar argumentos legales para denunciar o evaluar el uso abusivo de ese instrumento que según la Ley 26522 (aka Ley de Medios) solo se justifica en “en situaciones graves, excepcionales o de trascendencia institucional” según el artículo 75 (citado incluso por el locutor de la transmisión, según escuché en una reretransmisión de un nota en algún canal de noticias).
Tal vez, como se armó todo el circo entorno al “Plan de financiación de televisores LCD”, no hay argumentos “legales” para denuncias. A lo que me pregunto, es una nueva versión del alpargatas si, libros no? No escuché ninguna propuesta en este sentido. Vamos con el fútbol para todos, deportes para todos, televisores para todos, pero los libros? Para cuándo los libros?
Como parte del anuncio, una vez más recordó como un logro importante de la Ley 26552, haber derogado una norma de la dictadura. Pero mientras, Moreno sigue apretando con la Ley del Consumidor de esa misma época, y ni que hablar de sus métodos.
Otro corolario de esta historia, el caso de corrupción en el manejo de los fondos para obras públicas que involucra al Gobierno y la Fundación Madres de Plaza de Mayo pasó a la página 850 de los diarios. Se acordará alguien de esto dentro de una semana?
Como los argentinos, como colectivo, tenemos una memoria de mosquito, Carlos Saúl será seguramente senador reelecto por el oficialismo en octubre, el gobierno seguirá encomendándose a Moreno para que la inflación sea menor al 10%, seremos amigos y hablaremos bien de Brasil mientras nos dejen mandarles autos, los bancos serán amigos del pueblo en tanto no se necesiten sus fondos, los jubilados merecerán la movilidad previsional siempre que no sea la que pide la oposición, la Ciudad Buenos Aires no recibirá los fondos comprometidos mientras sea opositora, parecen de esquizofrénicos los afiches del FPV: la Ciudad y la Nación juntas, o sea que la voluntad popular un cuerno, no???????

La economía se las debo (igual que el gobierno)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Un tanto visceral, pero verdadero. Que este gobierno puede atribuir determinados logros a su gestión no es discutible. Sin embargo, la forma en que se viene haciéndo política desde hace cuatro años hasta esta parte es más que cuestionable. Así como se hace bandera de una gestión que implementó un ¿modelo? exitoso -que seguramente a más de uno le habrá resultado funcional-, no debe perderse de vista el innecesario enfrentamiento social que fomentan día día. O estamos con ellos, o somos enemigos de la Democracia. O estamos con ellos, o preferimos a Clarín o la dictadura. Digo yo, creer que son la democracia misma, ¿no es algo autoritario?. Justificar cada acción de gobierno en el respeto a los derechos humanos, ¿no es apropiarse de un ideal que no siempre coincide con el de ellos?
Por último, ¿cuando asumirán que la mayoría del pueblo ve lo que ocurre y saca conclusiones por sí mismo? ¿La inflación y la inseguridad las propagó Clarín?
Espero que el LCD que le financiarán a mi mamá permita despojarme de estas dudas cuando lo encienda y sintonice con el decodificador oficial su extensa y variada grilla de canales.